La Costa Amalfitana ha sido lugar de encuentro de culturas, artistas, emperadores, dux y héroes mitológicos. En ella encontrarás muchos pueblecitos a lo largo del Golfo de Sorrento, con casitas típicas pintadas de amarillo como el cítrico que sirve de marca para la zona, el limón.

Aunque Sorrento es un lugar bastante visitado por los turistas y muy conocido por sus procesiones, en mi opinión la parte más interesante de la Costa Amalfitana se encuentra más hacia el sur en la zona de Amalfi, pequeño pueblecito que da al mar con una catedral románica del siglo XI muy bonita.

En los alrededores encontrarás el pueblo de pescadores de Praiano casi escondido para mantener su identidad.

Tambien se encuentra en esa zona el famoso Positano que sale en todas las fotos de la zona pero resulta ser un pueblo donde no hay quien circule en época de vacaciones y más parecido a Torremolinos por los puestos playeros que al típico pueblecito con encanto.

En la zona de la montaña, no hay que perderse Ravello que es un lugar encantador encaramado en la cima de una montaña al que se llega por una carretera llena de curvas.

En este pueblo compuesto por casas que datan hasta del siglo XIII, se organizan conciertos de música con el mar de fondo en unos jardines magníficos (Villa Rufolo http://www.villarufolo.it/).

Si vas con un buen presupuesto, no hay nada como dormir en Villa Cimbrone (http://www.villacimbrone.com/) que está construido en lo alto de un acantilado con vistas a toda la costa. Si vas más escaso de presupuesto el Hotel Il Roseto (http://www.ilroseto.it/) es otra opción.

Además tiene la ventaja de que sus propietarios tienen una fábrica de limoncello llamada «Il laboratorio» al lado, que comercializa el limoncello con marca “I profumi Della costiera” y que está buenísimo.

Y este es otro de los highlights culinarios. El Limoncello es una bebida bastante azucarada cuya base son los limones típicos de la zona y que sienta de maravilla con moderación.

Si quieres comer comida casera en Ravello, nada mejor que el “Compa Cosimo”, restaurante típico italiano, regentado por la típica Mamma y con unas cantidades que te harán agrandar el estómago.

Por supuesto, algunos dirán “y dónde está Capri”, pues efectivamente, si te sigue sobrando tiempo, tienes que dedicarle por lo menos un día a esta isla a la que se llega en barco en menos de una hora desde Amalfi.

Capri ha salido en múltiples películas y además de ser el lugar a dónde van los artistas y gente de rancio abolengo, no deja de ser la ciudad desde la que gobernó el emperador Tiberio y de cuyo castillo todavía quedan algunas ruinas.

Capri es un buen sitio para hacer submarinismo y para hacer compras. Todas las tiendas de lujo están allí, ahora id mentalizados para la factura que se os avecina.

Si uno sigue la costa hacia el Sur se adentra en la zona de la mozzarella llamada el Cilento. Esta zona que está entre la Costa Amalfitana y Calabria es muy desconocida por los turistas.

En ella quedan todavía joyas como el yacimiento griego de Paestum, con unos templos del siglo VI A.c. mejor conservados que la Acrópolis de Atenas.

Esta antigua ciudad llamada Poseidonia tiene unos templos que quitan el hipo y un Museo con unos frescos, entre ellos el famoso del “Tufatore” o Nadador de gran interés histórico.

También se puede visitar lo que queda de la ciudad de Velia que también fue un emplazamiento de la época de gran relevancia en la zona, al ser la ciudad con mayor número de termas ya que canalizaba el agua desde las montañas.

Cerca de estos yacimientos se encuentran pueblecitos como Agrópolis o Pisciotta con casas y palacios renacentistas y abueletes jugando a las cartas en la plaza del pueblo.

De hecho, todavía quedan tradiciones como la de que cuando alguien se muere se pone un cartel en los tablones de anuncios de fiestas para informar a los paisanos.

El Cilento es una zona montañosa con carreteras con mucha curva pero paisajes muy bonitos y algún que otro pueblo como Roccagloriosa, una construcción del siglo VI a.c en lo alto de la cima de una montaña, o San Severino cuyos restos medievales se pueden incluso ver desde la carretera.

Dado que se trata de una zona costera con unas playas muy buenas y torres de vigilancia que se construyeron para desalentar a los sarracenos, nada mejor que alquilar un barquito (en la misma playa de Palinuro está “Quadrifoglio Palinuro”) para pasar el día y visitar las playas de Palinuro, Marina de Camerotta o Ascea.

La zona del Cilento es una zona ideal para hacer agroturismo, se trata como ya he dicho de la tierra de la mozzarella, queso hecho con leche de búfala que no de vaca. Es decir una leche con mayor concentración de grasa que la convierte en el paladar de los quesos.

En esta zona se pueden visitar granjas para entender el proceso de producción de este delicioso manjar no tan dietético y que los italianos ponen a sus pizzas.

Y es que la cocina de la zona es una delicia ya que se trata de productos naturales. Si quieres probar productos caseros, existe un lugar en la en la localidad de Pregliano llamado “Agriturismo Civitella “ que ofrece unas comidas y cenas de antipasti super variados y otros platos de carne y pasta con una calidad que en pocos sitios podrás encontrar….

Así que si lo que buscas es naturaleza, monumentos, playas, glamour y buen comer ; nada mejor que un extenso paseo por la Costa Amalfitana y el Cilento, que conforman lo que los italianos llaman la Campagnia di Napoli.

Alice Fauveau